Dante Gebel Y Su Ferrari

¡Cuando afirmo que Dios bendice extravagantemente, no exagero! Ya hacía mucho tiempo que no le “daba de comer a los fariseos” (¡Los pobres ya se habían quedado sin argumentos, y eso no es justo!) pero aún así, debo contar el testimonio.
Fuente: Live Radio Rd